jueves, 27 de febrero de 2014

Hannibal Begins

¿Han dejado ya de chillar los corderos, Clarice? Os suena esta frase ¿verdad? Pues sí, nuestro canibal más sofisticado, más culto y más gourmet está de regreso a partir de mañana viernes en la cadena NBC, ya que la serie "Hannibal" comienza su segunda temporada. La serie se salvó de la cancelación el año pasado, a pesar de que la ratio de audiencias no fue demasiado generosa con ella, y fue decayendo episodio tras episodio. Aún así, los responsables de la cadena NBC decidieron dar un voto de confianza a la serie, sobretodo por el carisma de su rentable psycho-killer protagonista (que ya ha aparecido en 5 adaptaciones para la gran pantalla), el prestigio de su creador (Bryan Fuller, responsable de series como "Dead Like Me" o "Pushing Daisies", ambas canceladas tras sus segundas temporadas, pero con críticas muy favorables por parte de la prensa especializada) y por el buen trabajo de sus actores (Huch Dancy está brutal como el atormentado agente Will Graham y no hace falta decir que Mads Mikkelsen es un digno sucesor de Anthony Hopkins interpretando al fascinante personaje de Hannibal Lecter). Una verdadera lástima que los premios se hayan olvidado del magnífico trabajo de estos actores.


Uno de los sellos de identidad de su primera temporada ha sido la idea del crimen como obra de arte. Este concepto ya comenzó en los años 90'. "El silencio de los corderos", sin ir más lejos, mostraba a un asesino que arrancaba la piel a sus víctimas para crearse un hermoso vestido, el propio Hannibal Lecter mataba a uno de los policías que venía a darle de comer y luego lo abría en canal por el estómago y lo colgaba en los barrotes de su celda como si fuera una mariposa con las alas desplegadas. Durante los 90' también se estrenó "Se7en", donde John Doe se dedicaba a asesinar a sus víctimas siguiendo las pautas de los siete pecados capitales, dichas muertes nunca nos eran mostradas en pantalla, sólo se nos describía a través del análisis forense la tortura que sus víctimas habían sufrido, como si se nos recitara una poesía del terror. Pues bien, "Hannibal" ha sabido bañar de belleza el horror de los asesinatos que nos son mostrados, una belleza poética, pictórica, escultórica, aunténticas piezas de arte contemporáneo. Así nos encontramos por ejemplo con un cadáver cuyo cuello ha sido atravesado por el mástil de un violonchelo (curiosamente se dice que es el instrumento que más se parece a la voz humana), sirviendo las cuerdas vocales de la víctima como cuerdas para tocar una bella melodía, convirtiendo así el cadáver en un precioso instrumento de cuerda. También encuentran otros "cadáveres" semi-enterrados y usados como fertilizante para cultivar setas. Una mujer desnuda colocada delicadamente sobre las astas de la majestuosa cornamenta de un ciervo. O un Tótem hecho de partes desmembradas de diversos cuerpos sin vida. Aquí dejo un vídeo recopilatorio de algunas de las muertes, porque con algunas de estas obras de arte es mejor una imagen que mil palabras:


En general, toda la serie es una delicia para los ojos, está bellamente filmada, no sólo por las mórbidas composiciones artísticas de las muertes, sino por cómo se nos muestra la comida (de hecho, el chef español José Andrés fue contratado para encargarse de la presentación de los platos que se van mostrando en la serie), cómo se nos muestra a Hannibal cocinando delicadamente sus apetitosos platos, la fotografía, el montaje, la iluminación y la ambientación. Visualmente, todo está meticulosamente cuidado con exquisitez, con muy buen gusto, lo que la convierte en una serie aún más inquietante, porque hace que te resulten bellas y deliciosas algunas imágenes que en realidad son crudas y macabras. Pero es que en esta serie la línea que separa lo desagradable de lo preciosista está completamente desdibujada, contagiando así a los espectadores el placer de Hannibal por la carne humana o la fascinación del detective Graham por los homicidios que se cometen. Todo ello acompañado por las hermosas partituras de la música de Brian Reitzell hace que realmente se te ponga el vello de punta. Nunca algo tan horrible había tenido un sabor tan delicioso.


Otro elemento interesante son los constantes guiños a la mitología creada por toda la saga literaria de Thomas Harris y por las distintas películas que se han realizado. Asi por ejemplo, en un momento de la serie Hannibal dice "Resulta agradable tener un viejo amigo para cenar.", un juego de palabras que recuerda a la frase que pronuncia Hannibal Lecter a Clarice Starling cuando hablan por teléfono en la última escena de la película de 1991. Incluso en un episodio se nos explica la historia de una joven estudiante del FBI que se encuentra bajo el tutelaje de Jack Crawford y que desapareció sin dejar rastro; dichas imágenes son un claro guiño al personaje de Clarice. En una ocasión, Hannibal huele a Will con el mismo inquietante gesto con el que más adelante olerá a la agente Starling en "El silencio de los corderos". Al fin y al cabo, esta es una de las grandes ventajas de las precuelas, que ya conocemos muchas de las cosas que les van a suceder a los personajes, por lo que podemos hacer aquello que tanto nos gusta como espectadores, que es avanzarnos a lo que va a suceder.


La mutua fascinación entre Lecter y Graham resulta absorbente. Parece como la seducción que lleva a cabo un depredador antes de matar a su víctima, haciendo que se sienta segura para luego devorarla sin ningún tipo de consideración. Vemos cómo Hannibal va tejiendo su sofisticada tela de araña, cómo se va gestando el psycho-killer en el que se acabará convirtiendo. Nosotros como espectadores, aunque sepamos cuál es el destino de Hannibal, caemos en sus redes y nos dejamos seducir por su elocuencia, por sus exquisitos platos, por su elegancia, por su brillante inteligencia, nos quedamos fascinados por su personaje, porque en realidad siempre nos ha fascinado el terror, lo inquietante, lo oscuro, lo peligroso, lo desconocido. Lo que resulta realmente perturbador de Hannibal es que pueda actuar como una persona normal, pero que en el interior esconda un monstruo que se come a la gente. Ambos actores llevan el peso de sus interpretaciones como si se tratara de una danza tremendamente bien coreografiada. Un juego de manipualción a dos bandas donde a veces no sabemos quien está manipulando a quien. Un cara a cara totalmente a la altura del que nos ofrecieron en su día Jodie Foster y Anthony Hopkins. Sin duda una de las grandes razones por las que considero que hay que ver la serie.


Si la pareja de actores protagonistas nos hacen gozar cada uno de los momentos que aparecen en pantalla, el elenco de personajes secundarios tampoco se queda atrás. Laurence Fishburne como Jack Crawford, Gina Torres como su esposa y sobretodo Gillian Anderson, que aunque hace un pequeño pero enigmático papel, consigue hipnotizarnos con su presencia. Anderson interpreta a la Dra. Bedelia Du Maurier, la psiquiatra de Lecter; elegante, misteriosa, sofisticada, enamora a la cámara cada vez que la mira directamente. Esperamos tener mucha más Anderson en esta segunda temporada, porque sus apariciones en la primera sabían a poco. En esta nueva tanda de episodios habrá algunas interesantes incorporaciones como por ejemplo la de Cynthia Nixon (la que fuera Miranda en "Sex & the City") interpretando a Kade Prurnell, una investigadora o Michael Pitt (visto en "Soñadores" o "Hedwig and the Angry Inch") interpretando a un sádico. Hay rumores de que podría aparecer David Bowie interpretando al tío de Lecter, pero a fecha de hoy aún no han sido confirmados.



La serie está plagada de simbolismo, convirtiéndola como decíamos antes en algo poético, y en algo pocas veces visto en televisión. Está claro que Bryan Fuller tiene un sello personal que hace que todas sus creaciones sean algo distinto a todo lo que hemos visto antes en televisión, aunque no haya tenido demasiada suerte y todas hayan sido canceladas tras su segunda temporada. Esperemos que con ésta tenga más suerte, ya que como dijimos el año pasado en el post donde presentábamos el estreno de la serie, Fuller ha planeado un arco de personajes para siete temporadas donde llegaremos a ver la trama de "El dragón rojo", "El silencio de los corderos", "Hannibal" y un desenlace inédito para el personaje, eso siempre y cuando la serie no sea cancelada.

De momento, aquí os dejo el tráiler de la segunda temporada, para que sirva de aperitivo de este deliciosa manjar que nos espera:


David


miércoles, 26 de febrero de 2014

El Seriátrico: Falcon Crest

Ha llegado el momento de regresar a la era del Teleindiscreta, las Cartas de Ajuste, la Bola de Cristal, los cubos Rubik, C.C. Catch, el Naranjito, Mecano, Spandau Ballet, Los ricos también lloran (o como la llamábamos todos aquí: "La Mariana"), la bambas Victoria, Los Cazafantasmas, las hombreras, Pac-man, los walkmans, la SúperPop, el vídeo "Thriller", los Especiales de Fin de Año con Martes y Trece, las gomas de borrar Milan Nata, los rombos en las pelis para adultos, el Blandi Blub, los documentales de Félix Rodríguez de la Fuente, Teresa Rabal, "El Sabadabadá" con Mayra Góemz Kemp y Torrebruno, y lo dejo aquí porque me animo y no paro... Pero para mí es sobretodo la época de "Falcon Crest": los viñedos, Angela Channing, Maggie y Chase Gioberti, Chu-Li... A mí me recuerda a la hora de la merienda (mis Tosta Rica con Cola Cao, mi bol de cereales Smacks de Kellogg's con leche, mis bocadillos de Nocilla...). Cuando llegaba del cole y todos los niños estaban viendo el Barrio Sésamo yo disfrutaba de lo que para mí era un placer mucho mayor. Mi madre me ponía en el vídeo la atrotinada cinta BETA donde a diario me grababan los episodios del mítico culebrón.



Esta soap-opera pertenece a la familia de "Dinastía" y "Dallas". Comenzó a emitirse en 1981, en España llegó en 1985, y se prolongó hasta 1990, con un total de 9 temporadas y la friolera de 227 episodios. En España, la emitían de lunes a viernes a las 15:35, justo después del Telediario. La octaba y novena temporadas ya se emitieron en horario de noche. Hay que decir que la serie cosechó un éxito mucho mayor aquí en España que en su tierra natal, donde "Dallas" y "Dinastía" se la comían con patatas. Incluso la seguimos en su mediocre última temporada, donde prácticamente todos los miembros del elenco original habían desaparecido y los pocos que quedaban fueron cayendo como moscas en los primeros episodios de dicha temporada de las formas más absurdas que uno se pueda imaginar.


En sus inicios, la serie narraba la constante lucha de poder entre dos acaudaladas familias, los Gioberti y los Agretti, que se disputaban el liderazgo de los viñedos del ficticio Valle de Tuscany (recreación televisiva del Valle de Napa). Por un lado, teníamos a la pérfida y maquiavélica Angela Channing (icónica Jane Wyman), que tras la muerte de su hermano (Jason Gioberti) quiere hacerse cargo de los viñedos, pero la mitad ha pasado por testamento a manos del hijo de su hermano fallecido, Chase Gioberti (interpretado por Robert Foxworth), que nunca había mostrado ningún interés por el mundo de los viñedos, pero a quien le ha tocado, contra su voluntad, hacerse cargo de ellos. Angela, por supuesto, hará lo imposible para que Chase abandone. Y por otro lado, tenemos a Melissa Agretti (interpretada por Ana Alicia), la única heredera de los viñedos de la familia Agretti (la gran rival de los Gioberti). Como he dicho antes, esa fue la premisa de la serie, ya que al final los viñedos servían sólo de escenario para mostrarnos elementos culebronescos que nos encantaban, como: triángulos amorosos, matrimonios fugaces y divorcios más fugaces aún, matrimonios entre primos, hijos secretos, testamentos perdidos, tesoros escondidos, resurrecciones, accidentes de coche y/o avión, asesinatos, mafias, nazis, secretos familiares, amantes cruzados, tiroteos, explosiones e incluso terremotos. Todos estos ingredientes y algunos más se convirtieron en la seña de identidad de la serie y el motivo por el que yo no me la perdía por nada del mundo a la hora de la merienda, y si alguna vez a mis padres se les olvidaba poner la cinta a grabar, ni os imagináis el berrinche que me pillaba...


Si "Dallas" tenía a J.R y "Dinastía" tenía a Alexis Colby, "Falcon Crest", como todo buen culebrón tenía su gran villano, en este caso villana. Estoy hablando de la magnífica Angela Channing: su peinadito, su sonrisa encantadora (de serpientes...) y sus prominentes pómulos que le proporcionaban un aire gentil y duro a la vez eran algunas de sus señas de identidad. Es la gran matriarca de la mansión Falcon Crest: ambiciosa, astuta, luchadora, manipuladora, tirana, dura, maquiavélica, extorsionadora, pasaría por encima de quien hiciera falta para conseguir el control absoluto de los viñedos. Angela Gioberti Channing Erikson Stavros Agretti, la pobrecilla se casó cuatro veces, de ahí la colección de apellidos, tuvo tres hijos: Richard Channing (que pensó que había muerto en el parto, pero que en realidad había sido robado al nacer), Julia, personaje que iba y venía (no sé que tipo de contrato debía tener la actriz, supongo que "Por obra y servicio", porque vamos...), que era la madre de Lance (el ojito derecho de Angela, ella quería que cuando muriera, él fuera quien se encargara de todo, aunque éste estaba profundamente enamorado de Melissa Agretti, a quien Angela no tragaba...) y finalmente Emma, una solterona que parecía que no estaba bien del todo, como que le faltaba un hervor o algo, que estaba como medio "iluminada"; muy divertida la época en la que se echó novio, un camionero fuertote llamado Dwayne (lástima que éste la palmó en el terremoto, dejando a Emma más trastocada todavía...).


Descomunales eran los enfrentamientos de Angela con los personajes de la serie, porque tarde o temprano se enfrentó con todos. Pero especialmente los que tenía con Chase Gioberti, con el que rivalizaba por la posesión de los viñedos. Estos fueron especialmente sonados porque ocurrieron dentro y fuera de la pantalla. Al parecer Jane Wyman y Robert Foxworth no se soportaban. De hecho, finalmente el actor sucumbió a las presiones de Wyman y su personaje desapareció de la serie tras morir ahogado intentando socorrer a Melissa y a otros personajes que cayeron con el coche en las aguas de la Bahía de San Francisco frente al Golden Gate, al final de la sexta temporada. Nunca encontraron su cuerpo, por lo que yo siempre pensé que reaparecería una noche deambulando por los viñedos como un fantasma (algo que ocurrió más de una vez con otros personajes), pero finalmente no fue así.


No hay que olvidar tampoco al mayordomo y chófer de Angela, Chao Li Chi, en España lo simplificamos a Chu-Li, que ya sabemos que no somos muy diestros con los idiomas... Siempre fiel a su señora, sin nunca llevarle la contraria, siempre a su lado en la verdes y en las maduras. Nunca tuvo demasiado protagonismo, pero siempre estaba ahí callado, observándolo todo, enigmático, entrenaba a Lance en artes marciales (claro era chino...). Vamos yo era súper fan de Chu-li y lo pasé fatal cuando al final de un episodio se cayó por las escaleras de la mansión Falcon Crest (que yo era un niño y no me gustaba ver sufrir a chinillos simpáticos así como así...).

Otro elemento clave de la serie eran sus triángulos amorosos. Por un lado teníamos el de Lance-Melissa-Cole. Lance (interpretado por Lorenzo Lamas, el Rey de las Camas), contra la voluntad de su abuela, estaba profundamente enamorado de Melissa (la heredera de la familia rival), pero Melissa estaba totalmente enamorada de Cole Gioberti (hijo de Chase y Maggie). Melissa se casó con Lance para unir los viñedos de ambas familias, llevando un hijo de Cole en el vientre (Joseph). Melissa acabará apoderándose de Falcon Crest y se convertirá en una persona insoportable (versión joven de Angela Channing), para terminar muriendo quemada como una bruja (en la que se había convertirdo...) en un incendio en la gran mansión Victoriana.

Por otro lado, teníamos el tríangulo protagonizado por Maggie-Chase-Richard. Nunca olvidaré el momento en el que Maggie le fue infiel por primera vez a Chase: una noche se fue toda decidida a la mansión de Richard a entregarse a él en cuerpo y alma y allí, mientrás se estaban besando, explotó una bomba, pero vamos, una bomba, bomba, de esas que no deja nada con vida. En la siguente temporada, a las dos víctimas les pasó lo que a cualquier víctima de una explosión casi nuclear como aquella: Maggie sufrió amnesia y no recordaba nada de aquella noche y Richard sufrió cojera, pero bueno una de esas cojeras que irá desapareciendo capítulo a capítulo sin que casi nos demos cuenta... La pobre Maggie que sobrevivió a esa explosión de la que ni MacGyver saldría vivo, luego murió al principio de la novena y última temporada de la manera más chorra posible, cuando fue a tomarse un baño a la piscina. Dejo el enlace del vídeo de Youtube porque de verdad que los guionistas que se empescaron esta muerte se merecen un premio:

http://www.youtube.com/watch?v=U0hJx5SywE4

Los cliffhangers de esta serie cuando finalizaba cada temporada eran estupendos. En ese aspecto, los guionistas verdaderamente se esgrimían las neuronas para dar con las situaciones más inverosímiles y las catástrofes más emocionantes que uno se pudiera imaginar, tomando incluso como punto de referencia las grandes producciones de catástrofes de los años 70 como "El coloso en llamas", "Aeropuerto 77" o "Terremoto", pero con un presupuesto mucho más bajo, por supuesto. Esto fue así sobre todo a partir de la tercera temporada, que finalizaba con un accidente de avión en el que estaban prácticamente todos los protagonistas de la serie. En la cuarta, la ya mencionada bomba en casa de Richard justo cuando estaba dando su primer beso de amor adúltero a Maggie. En el cliffhanger de la quinta tendrá lugar un terremoto que ya se vino anunciando durante algunos episodios anteriores, porque en esta temporada viene una hija de Chu-li que se sacaron de la manga, que resulta que era estudiante de sismología y que descubría que los viñedos se encontraban sobre una especie de epicentro sísmico. Este terremoto fue lo más, con paredes y muros de gomaespuma cayendo sobre todos los protas y movimientos agitados de cámara para simular los bandazos del mortífero terremoto. Y así los cliffhangers se fueron sucediendo con mayores o menores dosis de ingenio. Yo llegué a pensar que en cualquier momento anunciarían que un meteorito se acercaba a Falcon Crest. O dejo un vídeo que recoge algunos de estos momentos:



La serie tenía una algunos elementos super kitsch, que con el paso del tiempo se han convertido en objetos de culto. Por ejemplo, las fotos promocionales de cada nueva temporada eran todo un hito. Frente a la puerta de la mansión Victoriana que daba nombre a la serie, aparecían todos los personajes que iban a ser importantes en cada temporada y podíamos saber su grado de protagonismo en función de su ubicación en la foto, siempre con Angela Channing en el centro sentada sobre el emblemático sillón de mimbre. También la cartelera con la pegadiza sintonía donde iban apareciendo todos los personajes y que terminaba con la aparición del escudo heráldico dorado con forma de halcón, símbolo omnipresente de la serie.

También cabe destacar las special-guest-stars que fueron deambulando por la serie. Viejas glorias del cine que en una galaxia muy muy lejana fueron muy conocidas, pero que ya no los contrataba ni Dios, tuvieron su última oportunidad en esta serie. Así pudimos ver a Lana Turner (que había interpretado a la malvada Milady en "Los tres mosqueteros"), Kim Novak (la protagonista de "Vértigo") o Gina Lollobrigida. Y, como curiosidad, aunque no fuera tan vieja como para considerarla "vieja gloria", en la octava temporada apareció la actriz española Assumpta Serna.


La serie probablemente no soportaría un revisionado con los veteranos ojos de los espectadores del siglo XXI. Se trata de una serie con personajes súper estereotipados, donde los malos son muy malos y los buenos parecían salidos de una producción Disney, no había medias tintas. Ahora estamos acostumbrados a series con personajes oscuros, pero que nos despiertan ternura como Walter White, Tony Soprano, Don Draper, y de eso no había nada en "Falcon Crest". Por eso es mejor guardarla en el disco duro de nuestra memoria como una joya kitsch o ver de vez en cuando algún vídeo en Youtube para recordar aquellos tiempos en los que aún no habíamos visto prácticamente nada y nos parecía la mejor serie del mundo.

Para finalizar, quiero dedicar este post a una buena amiga, que es muy fan de la sección del Seriátrico y que fue la que me sugirió que homenajeara a esta serie. Un beso muy grande!

David





lunes, 24 de febrero de 2014

Sexpías de los 80'

Si en el anterior post regresábamos a los años 90', con este regresamos a los 80'. Concretamente a EEUU durante la era Reagan y la de la Guerra Fría. El próximo miércoles día 26 de febrero se estrena la segunda temporada de la serie "The Americans", serie de la cadena FX, creada por Joe Weisberg, quien había trabajado previamente como guionista de algunos episodios de las series "Damages" y "Falling Skies" y que a la vez resulta que es un ex-miembro de la CIA, por lo que conoce a la perfección todos estos temas. La serie tiene dos interesantes tramas que se van intercalando. Por un lado, las misiones de dos oficiales soviéticos de la KGB, que resulta que son matrimonio. Y, por otro lado, su vida conyugal y cómo pueden compaginar ambas cosas para llevar una vida "normal".


Al parecer, Weisberg se quedó fascinado por las historias que escuchó de algunos agentes que trabajaron junto a él, los cuales habían ejercido como espías durante la Guerra Fría y sobre todo por cómo tenían que arreglárselas para compaginar eso con su vida familiar. De ahí surgió la idea de crear una serie de televisión basándose en esta premisa. Además es cierto que actualmente había un hueco en la apretada parrilla televisiva para una serie de espionaje y además ambientada en los años 80', menos explotados televisivamente. Básicamente, la serie gira entorno al matrimonio Jennings (Philip y Elizabeth), dos agentes de la KGB que se hacen pasar por un matrimonio de estadounidense mientras realizan operaciones encubiertas para su patria llevando a cabo misiones totalmente TOP SECRET. Los papeles protagonistas están interpretados por Matthew Rhys en el papel de Philip Jennings, conocido por interpretar al hijo gay de Sally Field en "Brothers and Sisters" y Keri Russell interpretando a Elizabeth Jennings, conocida por interpretar a Felicity en la serie homónima, opera prima de J.J. Abrams. Aunque la crítica especializada ha alabado el trabajo de ambos, los premios han ninguneado totalmente sendas interpretaciones; quizás tengan más suerte en esta segunda temporada.


La serie tiene muchos aspectos interesantes. Para empezar resulta súper entrañable ver la tecnología retro que usaban estos espías de los años ochenta, con sus grabadoras de carrete, sus primitivos micrófonos ocultos y sus radios de onda corta con las que, como por arte de magia, recibían órdenes a través del código Morse. Nada de microchips, ni teléfonos móviles, ni internet; a Jack Bauer se lo hubieran cargado en el primer episodio con una tecnología tan rudimientaria... Otro elemento que me encanta, por su toque retro-kitsch, son las pelucas, éstas para nada tienen el nivel de sofisticación que llegaron a tener las de Sydney Bristow en "Alias", no... aquí son auténticas piezas de museo. Sus disfraces y sus pelucas crepadas son horribles, pero, una vez más, tenemos que recordar que nos encontramos en los años ochenta, por lo que todo esto está totalmente justificado. Aunque tengo que decir que yo me encuentro a alguien con una de las pelucas que lucen Rhys o Russell en la serie e inmediatamente llamo a la CIA, a la poli o a quien haga falta...


Otro elemento interesante es el hecho de abordar un período más o menos virgen en el territorio televisivo como es la Guerra Fría, esa época de inestabilidad total, en la que nunca llegó a haber propiamente una guerra, pero sí una tensión mundial en el ambiente, que podía cortarse con un cuchillo. Un período que se caracterizó por bombas nucleares almacenadas, que afortunadamente no llegaron a estallar y sleeper agents soviéticos, es decir, agentes espías que llevaban una vida "normal", pero que vivían con el temor de que sus actos pudieran llegar a desencadenar una guerra nuclear. De esta manera, la serie intercala momentos de ficción con hechos históricos reales que sucedieron durante el mencionado período.


La historia de amor entre Philip y Elizabeth es otro aspecto muy sugerente de la serie. Se trata de un matrimonio concertado, en el que además cometer adulterio forma parte de las obligaciones laborales de su día a día como espías encubiertos, pero aún así han conseguido establecer unos vínculos afectivos entre ellos mucho más estrechos que los de algunas parejas que se hayan unido en matrimonio totalmente enamorados. Quizás la intensidad de sus vidas, siempre al límite, que siempre incluyen decisiones de vida o muerte, han hecho que se forje un matrimonio mucho más sólido de lo normal. Han hecho ver durante tanto tiempo que son un matrimonio normal, fingiendo que se quieren, incluso teniendo hijos, que han conseguido serlo. Resulta interesante cómo una familia postiza termina siendo incluso más real que una familia de verdad. También hay que decir que la fórmula química entre Rhys y Russell tiene las cantidades exactas. De hecho, este matrimonio es uno de los motivos principales por los que ver la serie: todos sabemos cómo termina la Guerra Fría, pero nadie sabe cómo terminará esta pareja... Una vez más, como viene siendo costumbre en las series recientes, nos encontramos ante dos personajes con los que empatizamos a pesar de tratarse de un par de antihéroes, que hacen cosas terribles y moralmente cuestionables para proteger sus ideales. Los espías nos son presentados como un grupo de gente buena que se ve obligada a mentir todo el tiempo e icluso a cometer actos condenables.


Otro logro ha sido situar esta "idílica familia postiza" como vecinos de otra familia, cuyo patriarca es un agente de la FBI en activo (Stan Beeman interpretado por Noah Emmerich). El hecho de establecer al enemigo en la casa de al lado ha dado lugar a situaciones emocionantes. Nos pasamos la serie temiendo que la tapadera de los Jennings pueda ser desmantelada por Stan en cualquier momento. Y obviamente están los hijos de los Jennings, especialmente su hija adolescente (Paige), que al final de la temporada comienza a sospechar sobre la verdadera identidad de sus progenitores.




En mi opinión, la serie también tiene algunos aspectos que, como mínimo en la primera temporada, no terminan de funcionar. A veces, como también sucedía en "Alias" las misiones de los protagonistas son confusas, incluso incomprensibles o una mera excusa para ver cómo se van desarrollando las relaciones entre los distintos personajes. Algunos flashbacks sí que sirven para que entendamos aspectos del comportamiento de los personajes protagonistas o elementos importantes de su pasado que pueden ayudarnos a entender los motivos por los que están actuando como están actuando, pero otras veces parecen meros rellenos, que no aportan demasiado a la trama y que lo único que hacen es alargar la serie para que pueda tener los 13 episodios de rigor. Aún así, creo que estos aspectos pueden pulirse en su segunda temporada, ahora que ya han asentado el tono que quieren que tenga la serie y ahora que sus personajes protagonistas ya han sido presentados.


 

Estaremos pendientes viendo cómo evoluciona la nueva temporada de esta serie que el año pasado recibió unas críticas mayormente favorables por parte de la prensa especializada. De momento, aquí os dejamos un avance de esta segunda temporada:





David




jueves, 20 de febrero de 2014

Yo también fui un adolescente de los 90'

Cuando uno recuerda su adolescencia con una cierta distancia es que ya se está haciendo mayor... Yo pasé ese complicado pero estupendo momento de la vida durante los años 90', esos años en los que todos queríamos vestir y peinarnos como Brenda y Brandon, bebíamos latas de Seven Up con Fido Dido dibujado en su superfície, conocíamos a un Barney Stinson que aún no era un mujeriego empedernido, sino sólo "un médico precoz", considerábamos a Telecinco nuestra "pantalla amiga" y todos (y digo todos) escuchábamos Blur, Suede, Oasis o Nirvana y nos volvíamos locos en las discotecas cantando Country House, Beautiful Ones, Wonderwall o Come As You Are. También era una época en la que no existía Facebook, por lo que no hacíamos públicos todos y cada uno de nuestros movimientos, una época en la que no teníamos teléfonos móviles, por lo que cuando quedábamos con alguien a las 5 en punto en el centro, llegábamos a las 5 en punto, sin la posibilidad de mandar un whatsapp avisando que llegábamos tarde, una época en la que cuando nos perdíamos en algún sitio, preguntábamos a la gente en lugar de conectarnos a Google Maps. Por todo ello, resulta interesante regresar a ese pasado no tan lejano, que son los años 90'.


Pues bien, en enero del año pasado se estrenó en la cadena británica E4 "My Mad Fat Diary", una serie ambientada a mediados de los años 90', que sigue a Rae Earl, una chica de 16 años con problemas de sobrepeso y autoestima. En esa época, cuando tenías problemas escribías un diario, donde a veces enganchabas pegatinas, recortes de revistas o fotos de tus amigos, donde ahogabas tus penas, ponías la letra de una canción con la que te identificabas, etc. Ahora para todo eso ya tenemos Twitter y Facebook y nuestro grado de satisfacción sobre lo que hemos escrito o sobre la foto que hemos colgado se mide por el número de "me gustas" que recibes.


La serie toma como punto de partida el momento en que Rae Earl (gran descubrimiento el de la actriz Sharon Rooney, que hace poco la vimos haciendo un cameo en uno de los episodios de "Sherlock") sale de una institución mental en la que ha estado encerrada durante unos meses, tras haber intentado autolesionarse debido a sus problemas de baja autoestima y depresión. De esta manera, Rae tiene que enfrentarse al mundo real reencontrándose con sus amigos, a los que les ha dicho que viene de pasar una temporada  en el extranjero. Aún así, no rompe del todo el vínculo con la institución mental, puesto que sigue viéndose con un psiquiatra (el Dr. Kester) y mantiene el contacto con su amiga Tix, que sigue ingresada en la institución mental y que a veces parece poder ayudarla mucho mejor que sus amigos del "mundo exterior".


Rae Earl entra a formar parte de una pandilla formada por Finn (el guapete), Archie (el gay en el armario), Chop (el animal alocado), Chloe (la chica popular y guapa que a veces hace sentir francamenta mal a Rae) y Izzy (una chica guapilla, pero un poco pava, eso sí, sin la maldad de Chloe). Rae consigue un privilegiado lugar en el grupo, gracias a su atractiva personalidad, no es tonta, ni superficial, tiene opiniones, conoce de música y encaja a la perfección, especialmente entre los chicos, que de manera cariñosa la llaman "Raemundo" y eso despierta inmeditamente los celos de Chloe. Ellos la aceptan por lo que es, no por su aspecto.


La serie se centra principalmente en las relaciones entre Rae Earl y los otros personajes. Por un lado, tenemos la relación de Rae con su peculiar madre (Linda), la cual sabe perfectamente por todo lo que ha pasado su hija, pero aún así cuando Rae sale de la institución mental, está más concentrada en otro tema, ya que durante el ingreso de su hija se ha echado un novio, pero no un novio cualquiera, un hombre sin papeles (Karim), que se esconde en su casa para que los de inmigración no lo retornen a su país. Rae tiene un montón de problemas con su a veces poco comprensiva madre, y el hecho de que se haya echado un novio con el que apenas puede comunicarse, tampoco ayuda a que se lleven mucho mejor. Linda siempre está haciendo dietas absurdas, una que me pareció genial fue la dieta alfabética (en la que cada día sólo podia comer alimentos que comenzaran por una letra en cuestión), yo no soy dietista, pero vamos...Tengo que reconocer que el personaje de la madre es hilarante y que nos sirve una buena dosis de carcajadas. Por el episodio que he podido ver de la segunda temporada, al parecer Linda comienza a tener los primeros síntomas de la menopausia (por ejemplo llorar viendo "La ruleta de la fortuna"...) y está preocupada por lo que su novio (12 años más joven que ella) pueda sentir, así que empieza a birlarle camisetas a Rae para (y cito textualmente) parecer más "funky".

Luego está su relación con Chloe, con la que hay una especie de competitividad constante. Chloe la introdujo en el grupo, pero parece que lo haya hecho sólo para reafirmar que ella es la más guapa, para tener a alguien con la que compararse y salir ganando, por eso luego siente una gran frustración cuando Rae se gana el cariño de todos los chicos con su excepcional manera de ser. Tenemos también su relación con el Dr. Kester, relación que no comienza con muy buen pie, porque Rae prefería a su antiguo psiquiatra, básicamente porque lo encontraba muy atractivo y del que estaba un poco pillada, pero Kester luego se convierte en una pieza de apoyo clave para Rae, mostrando siempre una absoluta fe ciega en su capacidad de recuperación. De alguna manera, el Dr. Kester acaba ejerciendo de padre y madre de Rae, dos figuras imprescindibles en la vida de cualquier adolescente y que para ella no están del todo disponibles.


Y luego llega mi favorita, la relación entre Rae y Finn, un URST en toda regla. Chico guapo que sabe que Rae es mucho más guapa de lo que los estereotipos de la sociedad quieren hacernos creer. Son dos fanáticos de Oasis, hay química entre ellos, están ahí el uno para el otro cuando más lo necesitan, y queda clarísimo, en tan sólo 6 episodios, que se quieren y ella lo desea, vamos que si lo desea. Los vemos durante toda la serie como grandes amigos, aunque ella esté obsesionada con su culito respingón y su media sonrisa de malote, pero al final de la temporada parece que su relación hace un paso al frente. Tendremos que ver cómo se desarrollará todo esto durante la segunda temporda, aunque por el primer episodio de la serie, ya se puede ver por donde irán los tiros. Yo espero que acaben juntos porque le he cogido cariño al personaje de Rae ¡Yo la veo guapa! Y si no mirad la foto... Aquí dejo un vídeo con algunos de los mejors momentos que este par han vivido durante la primera temporada:


A priori, puede parecer una comedia más sobre adolescentes, pero en mi opinión MMFD es mucho más que eso, trata temas muy dolorosos como son la autolesión, el suicidio, la falta de autoestima, la soledad que se puede sentir estando rodeado de gente, el bullying, la falta de autoestima, etc. de manera muy honesta, sin artificios, y sin ningún tipo de edulcorante que endulce la crudeza de ello; eso la convierte en una serie única en su género. El acertado reparto ayuda a dar verosimilitud a todos estos temas a veces delicados y a veces algo peliagudos.


En todo momento, la serie viene acompañada de unas graciosas animaciones que aparecen en pantalla y que dibujan de manera muy gráfica y divertida lo que nuestra protagonista siente en todo momento, sea vergüenza, sea excitación, sea dolor, sea emoción, sea lo que cree que los demás están pensando de ella en ese momento... Recordemos que toda la serie está narrada como si fuera el diario íntimo de Rae, un diario que comienza a escribir tras su salida de la institución mental por recomendación del Dr. Kester, como recurso terapéutico. La narración de Rae ofrece siempre su interesante punto de vista sobre todo lo que está viviendo o sobre todo lo que le está sucediendo.


Todo esto con un buen guión, poco típico en las comedias sobre adoelscentes y el atractivo lazo final que se consigue a través de la estética y la música de los noventa, dan a la serie un aire fresco, nuevo, entrañable, en el que encuentras, risas, lágrimas, URST, relaciones reales, honestidad y personajes bien dibujados. Por todos estos motivos estamos contentos de volver a tener entre nosotros a Rae and the Gang durante las próximas siete semanas.


David

lunes, 17 de febrero de 2014

El castillo de naipes

El pasado viernes dio comienzo la "carnicería" de Kevin Spacey y Robin Wright con la segunda temporada de "House of Cards", serie revelación del año pasado en canal on-line Netflix. Como sucedió con la temporada anterior, los 13 episodios de esta segunda fueron colgados en la red de un tirón, por lo que el ritmo de visionado lo marca uno mismo, no hay que esperar semanalmente a que se emita el siguiente episodio. Como ya informamos en el último Seriómetro, la serie ha sido renovada a una tercera temporada, incluso antes de que se colgara esta nueva tanda de episodios en la red; supongo que su reconocimiento en los premios y las favorables críticas que ha recibido por parte de la prensa especializada han tenido algo que ver en todo ello.


Durante la primera temporada, pudimos comenzar a ver cómo el matrimonio Underwood (Frank y Claire, Spacey y Wright, respectivamente) iban hurdiendo un maquiavélico entramado para ascender en la Casa Blanca. Para ello, son necesarios todo tipo de recursos: la extorsión, el chantaje, la manipulación e incluso el asesinato. El matrimonio Underwood es el mal en estado puro y no se parará ante nada ni ante nadie, no tiene ningún tipo de escrúpulos, ningún tipo de principios, pasan por encima de cualquier obstáculo que se les ponga delante, y poco a poco van colocando milimétricamente todas las piezas de su complicado castillo de naipes, con el fin de llegar a la carta más alta sin que su obra se desmorone por el camino hacia su implacable ascenso. Lo más inquietante de todo ello es que, como espectadores, vamos asistiendo a este imparable proceso como si estuviéramos viendo un documental del National Geographic, en el que observáramos a cámara lenta cómo una Boa constrictor, con su atractiva coloración, siempre en solitario y siempre por la noche, prepara una emboscada a su presa para luego acabar matándola por constricción hasta estrangularla completamente.


El rostro del mal en esta serie tiene dos caras. Por un lado, la de un "sospechoso habitual", Kevin Spacey, interpretando a Frank Underwood (o Francis, como sólo le llama su esposa, con un tono de los más escalofriante). En mi opinión, éste es el personaje más terrorífico de la carrera de Spacey, mucho más que su Keyser Söze de "Sospechosos habituales" o que su John Doe de "Se7en". Spacey nos lo sirve con una elegancia, una mirada y una voz inquietantemente irónicas, como de alguien que se ha estudiado el manual del arte de la manipulación página por página, convirtiéndose en un ser que podría convencernos de que nos voláramos la tapa de los sesos con sólo unas pocas palabras.

Es una persona ambiciosa, culta, experimentada, que conoce todos los mecanismos de la personalidad humana a la perfección y que por ello puede conseguir lo que quiera de las personas, siempre en beneficio propio, parece que no sea capaz de sentir empatía o compasión por nadie. Su arma más letal es su inteligencia. Me encanta cada vez Frank rompe la cuarta pared de la pantalla y se gira hacia la cámara para comentarnos con sorna y sarcasmo lo fácil que es manipular a la gente, a veces nos comenta que lo que acaba de decirle a alguien es todo una sarta de mentiras o simplemente se nos queda mirando, intentando que los espectadores nos convirtamos en cómplices de su maquiavélico plan. De hecho, es sólo en estos momentos en los que se dirige a la cámara cuando vemos al verdadero Frank, sus verdaderas intenciones, pero también su vulnerabilidad. SPOILER: En los primeros segundos de la serie Frank mata a un perro, luego se dirige hacia la cámara y dice "No tengo paciencia para las cosas inútiles." Esto ya sirvió para marcar perfectamente el tono de la serie. Ya he hablado en alguna ocasión de la horrible sensación que la muerte de un animal o de niño provoca en los espectadores. A nivel audiovisual, ya estamos preparados para prácticamete todo, menos para eso.



Pero, Frank no sería el que es sin su esposa, Claire Underwood (maravillosamente interpretada por Robin Wright, quien recientemente ha ganado el Golden Globe a Mejor Actriz Dramática por este papel). Claire es como una gata depredadora, se mueve elegantemente, sale a correr por las noches, largos paseos durante los cuales planea, hurde, trama. Al principio de la serie, parece un personaje más inocente, más vulnerable, que vive a la sombra de su marido, pero Claire es mucho más que todo eso, Claire es la otra cara del miedo, de una belleza abrumadora y una elegancia deslumbrante, pero igualmente voraz, despiadada, infalible, la gran mujer que hay detrás de todo gran hombre. Digamos que la princesa Buttercup de "La princesa prometida" se ha convertido en una reina malvada que hace que Cersei Lannister parezca Bambi a su lado.




Juntos son como Glenn Close y John Malkovich en "Las amistades peligrosas", una pareja de nobles, cuyo mayor poder no es su estatus social, sino unas mentes pensantes que son capaces de cualquier cosa, más allá de lo que un ser humano corriente sería capaz de imaginar. Sus escenas cuando se reencuentran a altas horas de la madrugada en su casa junto a la ventana, compartiendo un cigarrillo, cruzándose pocas pero punzantes palabras, forjando nuevos planes para conquistar el poder, resultan totalmente perturbadoras. Forman un tándem perfecto, sabiendo qué pieza del tablero de ajedrez han de mover en cada momento para terminar tumbando al Rey. Es un matrimonio peligroso, con una relación casi enfermiza, a veces tienes las sensación de que se quieren, otras de que se detestan, pero siempre te das cuenta de que se comprenden a la perfección, porque ambos comparten un mismo propósito: llegar a conquistar el trono del poder. Está claro que Frank quiere llegar a ser el Presidente de los Estados Unidos y Claire su Primera Dama y para ello destruirán a quien haga falta, sin ningún tipo de remordimiento, sin mirar atrás, sin contemplar las vidas que han destruído durante ese cruel camino hacia el poder absoluto.


Se trata pues de una compleja intriga política con constantes giros de guión y con muchos personajes (es de esas series que te hacen preguntarte constantemente ¿Y este quién era?). Sus diálogos tienen la mala leche que es de esperar de un drama de estas características, parecen diálogos escritos por Aaron Sorkin, aunque en este caso no lo son, pero está claro que beben de su influencia, porque son rápidos, concisos y están repletos de inteligentes dobles intenciones. Está claro que Sorkin ha comenzado a crear escuela. Dejo algunas muestras para que podáis ver lo bien escrita que está:

"Así es como se devora a una ballena. Mordisco a mordisco."

"Lo que ansía un mártir más que nada en el mundo es una espada sobre la que caer, por lo que lo mejor es afilar la cuchilla y sostenerla en el ángulo correcto."

"Los amigos son los peores enemigos".

"Hay dos tipos de vicepresidentes: los que son como felpudos y los matadores. ¿Cuál creéis que tengo la intención de ser?"

Sólo he podido ver los tres primeros episodios de esta segunda temporada durante el fin de semana, pero por lo que he podido observar, esta segunda tanda llega pisando fuerte. Sin ir más lejos en el primer episodio hay un momento WTF! de esos que te dejan con la boca abierta y que te hacen pensar que en los planes de los Underwood no existen los límites, son tiburones y devoran cualquier presa, dejando un rastro de sangre por el camino, que de momento sólo los espectadores somos capaces de ver.

Let the butchery begin!

  

David

jueves, 13 de febrero de 2014

Seriefórum: Los mejores polvos de las series de televisión

Mañana es San Valentín o lo que es lo mismo, el Día de los Enamorados. Pero ¿por qué lo llaman amor cuando quieren decir sexo? Por ese motivo nos ha parecido apropiado organizar un nuevo Seriefórum de emergencia en el que nombrar las mejores escenas de sexo que hemos visto en las series en estos últimos años. O sea, que nos vamos a poner un poco pornos, un poco cerdos, con vídeos no aptos para menores. Pero no os preocupéis: este sigue siendo un blog sobre series, por lo que todos los enlaces que pongamos serán de Youtube, nunca de Xtube... Vamos a ponerle a este post sólo unas cuantas XXX o unos cuantos rombos y a dejarnos llevar por esas escenas de sexo que nos han quedado grabadas en la memoria, especialmente ahora que canales privados como la HBO han hecho del sexo uno de los lemas de muchas de sus producciones.

1) Lost: Kate y Sawyer en la jaula (Temporada 3)

Aunque Kate comenzó desarrollando fuertes sentimientos hacia Jack, prácticamente desde el minuto cero, cada momento que estaba junto a Sawyer, la tensión sexual entre ambos sacaba chispas. No nos olvidemos que Kate es una bad girl y que, por lógica, le gustan los "malotes". Comienzan discutiendo y terminan chingando, y es que las discusiones es lo que tienen, toda esa energía tiene que canalizarse de alguna manera... La escena está bien por dos motivos: por un lado, porque todos queríamos ver a Kate liándose con Sawyer y dejando a un lado al sosainas de Jack; y, por otro, porque el hecho de que lo hagan dentro de una jaula tiene su morbete...


2) Dexter: Dexter y Hannah en la "Kill Room" (Temporada 7)

Estaba claro que Dexter tenía que encontrar una media naranja que estuviera a su nivel. Esa persona no podía ser Rita (demasiado insoportable y pardilla), tampoco podía ser Lila (demasiado demente y pirómana), tampoco podía ser Lumen (demasiado traumatizada por sus múltiples violaciones); pero entonces llegó Hannah, esa especie de Yedra Venenosa que mata a sus víctimas con plantas (vamos la chica ideal). En el episodio 7x06, Dexter se disponía a matarla, la tenía sobre su mesa de operaciones en la plastificada y profiláctica "Kill Room", pero finalmente le puede la pasión, la desata y se la tira, transformando su deseo de matar en deseo sexual. Poco a poco, Dexter comienza su proceso de humanización, y como ser humano que es, también se pone cachondo de vez en cuando...

http://www.youtube.com/watch?v=XuA-RbZrhWg


3) True Blood

a) Sookie y Bill (Temporada 1)

Sookie piensa que Bill ha muerto, está toda triste en el porche de su casa añorando a su gran amor, así que decide ir al cementerio para dejarle algunas flores sobre la tumba. Vaya sorpresa se lleva la tonta de Sookie, cuando un brazo sale de bajo tierra a lo "La noche de los muertos vivientes" y es Bill a lo zombie y como Dios le trajo al mundo cubierto de tierra y polvo, y eso: que un polvo bien sucio y guarro es lo que van a echar estos dos...


b) Lorena y Bill (Temporada 3)

Muchas son las escenas de sexo que aparecen en "True Blood" (aka "True Porn") y seguro que si nos dejáis comentarios podemos encontrar alguna mejor que las de los vídeos que proponemos. Hemos elegido este porque, una vez más, como sucede en algunas de las escenas anteriores, el odio lleva a una química sexual y a una pasión que rompe con todo. En este caso, Bill se la folla (ya puedo decir "se la folla", que ya no estamos en horario infantil...) mirándola a la cara, pero la odia tanto, que le retuerce el pescuezo y de esta manera no ve esa cara que tanto detesta, asi como si le estuviera dando "por detrás que mola más..."


 

4) Game of Thrones: El nacimiento de Khaleesi (Temporada 1)

Daenerys (Dany para los amigos...) quiere dejar bien satisfecho a Khal Drogo, quiere aprender a darle placer y por ello pide consejo a una de sus esclavas, y resulta que Dany aprende rápido, porque en la siguiente escena, Drogo intenta poseerla por detrás, claro es un macho, macho, pero Dany toma las riendas del asunto y acaba follándoselo ella, se sube a él y lo monta como más adelante acabará montando a sus dragones. Seguramente, ya estaba empezando a sentir el fuego de sus dragoncitos rugiendo en el estómago.


 

5) Mad Men: Betty Draper masturbánsode (Temporada 1)

No se trata propiamiente de un polvo, sino de una escena masturbatoria protagonizada por la "angelical" Betty Draper. La verdad es que Betty tiene poco trabajo, tiene una sirvienta que le hace la casa y le cuida los hijos, y el aburrimiento es lo que tiene, que o comes o te tocas un poquito... En este caso, Betty se pone "toa burra" con el triqui-traca de la lavadora y con la cabeza llena de fantasías sobre sexo con hombres desconocidos, y así alcanza uno de los mejores orgasmos de su vida. Luego, cuando su "dulce" hija (Sally) se hace un dedillo en casa de un amiguito, le pega una ostia que no veas, reprochándole que ese no es el comportamiento adecuado de una señorita. Betty en el fondo es un Don en potencia. Recordemos que en un episodio se tira a un desconocido que conoce en la barra de un bar, en el baño del local y que en la última temporada (cuando ya no está con Don) se lo tira a lo macho cabrío, y luego es ella a la mañana siguiente la que no quiere saber nada de él...


6) Sex and the City: A Charlotte la llaman "Puta" durante el coito (Temporda 3)

En un Seriefórum sobre el sexo no podría faltar una serie como "Sex and the City", que lleva la palabra "sexo" en su título. Hay un sinfín de secuencias sexuales, especialmente protagonizadas por Samantha, intentando acostarse con curas, hombres con penes gigantescos, hombres con penes diminutos, enanos, hombres muy mayores con el culo arrugado, bomberos, porteros, mujeres, modelos, pintores, gays, de todo. Miranda no se queda corta tampoco: un hombre que toma una ducha purificadora después de acostarse con ella, uno que quiere que le lama el culo, uno que sólo lo quiere hacer en sitios públicos, otro que sólo lo quiere hacer mientras miran porno... Pero en esta ocasión, el vídeo que hemos seleccionado es de Charlotte (la más puritana), los encuentros sexuales de este personaje, especialmente durante la tercera temporada en la que se ha propuesto encontrar marido, son totalmente hilarantes. Concretamente, no podía parar de reírme en el episodio en el que está con un hombre que cuando llega al orgasmo la insulta gritando You fucking bitch, you fucking whore! y la pobre cuando decide repetir con él, para ver si era cosa de esa vez y ya está, está ahi poniendo caras de sufrimiento, esperando que el otro se corra para ver si lo vuelve a decir o no...

 

7) Nip/Tuck: Christian Troy y Gina en el terrado (temporada 5)

Otra serie en la que el sexo era abundante. Muchas serían las escenas de sexo que podrían aparecer aquí, y si recordáis algunas especialmente morbosas, os invito a que las sugiráis en vuestros comentarios. Yo he elegido una que ya escogí para el Seriefórum de los momentos más WTF!. Gina le prepara una cena romántica a Christian Troy en la azotea de un edificio, estos dos terminan haciendo el amor (por supuesto), muy acaloradamente, cuando de pronto..., mirad el vídeo para que os quedéis como yo me quedé cuando lo vi...


8) Queer As Folk: Primer encuentro sexual de Brian y Justin (Temporda 1)

QaF tampoco se quedaba corta en cuanto al sexo. El primer encuentro sexual / primera vez que se ven entre Brian y Justin fue de un elevado voltaje sexual. Escena con música petarda, cuerpos sudorosos, etc. Resulta ideal para memorizar la jerga del mundillo gay (top, bottom, rimming,...) Hay que tener en cuenta que Randy Harrison, el actor que interpreta a Justin es gay, pero Gale Harold, el actor que intepreta a Brian, no lo es, pero os aseguro que da el pego... Por cierto, yo de mayor quiero tener un loft como el que tiene el personaje de Brian en la serie.

9) Tell Me You Love Me: Para quien quiera ver la cosita de Ian Somerhalder en acción (Temporada 1)

Otra serie del canal privado HBO, que tuvo una sola temporada. Ésta con escenas de sexo explícito, y por explícito, quiero decir eso, vamos que se ve todo. Serie no muy conocido en España que trataba sobre diferentes historias cruzadas relacionadas siempre con el sexo. Una chica destrozada por la rotura de su última relación, que encuentra a un atractivo joven (Ian Somerhalder), una pareja que intenta tener un hijo y para los que el sexo se convierte en algo puramente mecánico y forzado para esa finalidad y una pareja que ha perdido la llama de la pasión, sobretodo él. De esta serie, obviamente sólo he encontrado la versión censurada, para los curiosos y morbosetes, os tendréis que mirar la serie...


10) Buffy, The Vampire Slayer: Buffy y Spike dale que te pego...

Está claro que el sosainas de Angel no era suficiente para la cañera de Buffy, por eso lo sacaron de la serie y le dieron su spin-off, bueno, por eso y por todo el rollo de que un vampiro y la cazadora no pueden hacer el amor porque habría un cataclismo, bla, bla, bla... Por eso, tras la marcha de Angel, Joss Whedon y su equipo de guionistas vieron el potencial del URST entre Buffy y Spike. Concretamente, recuerdo una escena (lo lamento, ahora no sé deciros en qué temporada era...) en la que se ponen alli "to burros" en la guarida de Spike y comienzan allí con lo suyo, cargándose las vigas de la casa y todo, vamos, que casi echan el edificio abajo, porque, claro, los dos son superfuertes y con la pasión, pues como que no se controlan... Tengo que volver a ver "Buffy", pero ya!

11) The Tudors / Rome / Masters of Sex...

Ahora os toca a vosotros. Como he dicho antes, hay muchas series actualmente que han apostado por el sexo para captar la atención del público; está claro que el sexo vende. En el cine, ya hace tiempo que lo sabían y ya lo han explotado mucho ("Instinto Básico", "StripTease", "Acoso", "Una proposición indecente", "Atracción fatal", "Nueve semanas y media", etc.). Por ello, os invitamos a que nos propongáis algunas más que recordéis y si queréis y los encontráis, podeís linkarnos el vídeo. Venga, animaros!

Naiara y David

lunes, 10 de febrero de 2014

Post número 100: Grey's Anatomy

Si hace unas semanas celebrábamos el primer aniversario del blog, volvemos a estar de celebración, dado que hoy publicamos el post nº 100, y para celebrarlo hemos decidido hablar de la serie que, para qué nos vamos a engañar, ha dado nombre a este blog y de la que aún prácticamente no hemos hablado; quizás en algún Seriefórum o en algún Seriómetro hemos dicho alguna cosa sobre ella, pero aún no le hemos dedicado propiamente un post. Estoy hablando de "Grey's Anatomy" (Anatomía de Grey), que actualmente está de parón "navideño", pero que retomará la recta final de su décima temporada el próximo 27 de febrero.

"It's a beautiful day to save lives, let's have some fun", con esta frase el Dr. Derek Shepherd comienza la mayoría de sus operaciones en esta serie de médicos. Sí otra serie sobre médicos, por si no tuviéramos pocas, incluso durante 4 temporadas coexistió con la más veterana serie "E.R." (Urgencias), por lo que los fans de las series de hospitales teníamos el corazón partido entre el County General y el Seattle Grace, aunque finalmente "E.R." se despidió de sus seguidores tras 15 temporadas en el 2009, mientras las andanzas de Derek, Cristina, Alex, Miranda, Callie, etc. siguen emocionándonos semana tras semana desde la lluviosa ciudad de Seattle.

Está claro que las series sobre hospitales gustan, en Estados Unidos hay una que se llama "General Hospital" que en abril del año pasado cumplió sus 50 años de emisión. Y ¿cuál es la clave del éxito de estas series? Quizás sea que los hospitales son lugares donde a diario se viven situaciones de vida o muerte, donde se toman decisiones que pueden cambiar de manera permanente la vida de las personas, donde los sentimientos están a flor de piel, donde hay gente que dice su último adiós a un ser querido, donde verdaderos superhéroes sin superpoderes salvan las vidas de personas en situaciones críticas. Todos estos son ingredientes perfectos para situar una serie de televisión.


Entonces entre tantas series sobre hospitales ¿qué ha convertido a "Grey's Anatomy" en un éxito? ¿qué la distingue del resto? ¿qué ha hecho que sus audicencias sigan rondando los 10 millones de espectadores tras diez temporadas? En mi opinión, todo esto ha sido gracias a sus atractivos personajes, con unas personalidades muy bien dibujadas, con unos tics reincidentes que los humanizan y los hacen únicos, a lo que hay que sumarle la enorme química que hay entre ellos. Un elenco de actores y actrices en estado de gracia que ha sabido captar en todo momento el tono y que han conseguido que sus sentimientos traspasen la pantalla, haciéndonos reír, llorar, sufrir, disfrutar, que nos sintamos como un residente más caminando por los pasillos con enormes ventanales salpicados de lluvia del Seattle Grace. Hay que apuntar que sólo Sandra Oh (que interpreta a Cristina Yang) ha ganado el Golden Globe y que Katherine Heigl ha ganado el Emmy por intepretar a Izzie Stevens, y que hace tiempo que los votantes de estos premios parecen haberse olvidado del maravilloso trabajo que realiza este gran elenco.

A continuación apuntaré los motivos por los que creo que deberíais ver esta serie, si no lo estáis haciendo ya:

Las historias de los pacientes:

Sobretodo en las primeras temporadas se cuidaban mucho estas historias, que siempre estaban perfectamente entrelazadas con las de los protagonistas residentes del hospital. Eran siempre casos curiosos, extremos, muy peculiares, a veces de enfermedades muy poco conocidas, pero que "quedaban muy bien en cámara". Así vimos: una víctima de violación que llega al hospital en coma y que esconde en su boca algo aterrador (un trozo del pene de su asaltante); dos víctimas de un accidente de tren (Bonnie y Tom) que llegan con una barra de acero que les atraviesa el estómago, como si se tratara de un pincho moruno, no se conocían pero por la situación han desarrollado una especie de amistad entre ellos, nuestros médicos tendrán que decidir a cuál de los dos salvar teniendo en cuenta sus probabilidades de sobrevivir por la extensión de sus heridas; una paciente que en el momento menos adecuado sufre orgasmos espontáneos; un paciente con sangre tóxica, que cuando es abierto en la sala de operaciones hace que todos sus médicos caigan inconscientes al suelo a causa de la toxicidad de su sangre; Annie, una chica obesa con una tumor de unos 27 kilos en el estómago; un hombre que aparece en el hospital embarazado; un paciente que llega con un proyectil de un bazooka construído por él mismo clavado en el estómago, el problema es que dicho proyectil todavía tiene que estallar y cualquier movimiento brusco puede activar la explosión, convirtiendo su extracción en un caso para MacGyver; dos pacientes que se han quedado enganchados haciendo el amor porque el piercing que él lleva en el pene se ha quedado cogido al DIU de ella; un hombre que llega con los genitales hinchados, porque tras mear en el Amazonas,un pez se metió corriente arriba dentro de su pene y clavó sus tentáculos en él; una amiga de Derek y Addison que les pide que le extirpen los dos pechos y el útero, porque todas las mujeres de su familia han muerto de cáncer, aunque ella de momento está totalmente sana; entre muchas otras.

Los ascensores:

¡Madre mía si los ascensores de esta serie hablaran! Los ascensores han tenido siempre una importancia crucial en esta serie. Han sido un lugar donde las tensiones sexuales entre los personajes han llegado a cotas inimaginables (podríamos ver perfectamente toda la evolución de la historia de amor Derek-Meredith si juntamos todas las secuencias que estos dos personajes han compartido en los ascensores del Seattle Grace), por supuesto cuando él le pidió para casarse, como no podía ser de otra forma, lo hizo dentro del ascensor. Un lugar de situaciones de vida o muerte: George O'Malley realizó una operación a corazón abierto dentro de un ascensor, cuando sólo era un interno. Un lugar de confesiones: Arizona pidió para salir a Callie por primera vez en un ascensor y Callie le dijo que estaba embarazada de Sofia también en un ascensor. Un lugar de grandes escenas: Izzie saliendo con su precioso vestido rosa para ir a ver a su paciente Denny Duquette y decirle que sí que quiere casarse con él. Aquí os dejo una de mis escenas de favoritas:



La más grande historia de amor de la televisión: "You are my person"

Cristina Yang y Meredith Grey llegaron juntas al hospital Seattle Grace, ambas comparten una fuerte ambición, quieren ser la mejor interna, luego residente, luego especialista, pero eso no las convierte en rivales, sino en las mejores aliadas, porque se apoyan en todo momento, incluso cuando no tienen razón, están allí la una para la otra, en sus abortos, sus separaciones amorosas, las muertes de familiares. Ellas mismas se autodenominan "The Twisted Sisters" (las hermanas retorcidas"), porque a veces son totalmente insensibles e incapaces de mostrar y sentir como las personas normales, están como deshumanizadas, lo cual las convierte en perfectas profesionales, ya que rara vez dejan que sus sentimientos se crucen con sus decisiones médicas. Ambas son sarcásticas y algo oscuras.



Vamos viendo como las relaciones de amor entre los personajes vienen y van, pero esta relación sigue ahí intocable. Rara vez vemos que afloren los sentimientos entre ellas, pero no hace falta que las veamos abrazarse o decirse que se quieren, porque el amor que estas dos se profesan traspasa cualquier pantalla de televisión. La química entre ellas es increíble, es como si fueran amigas, amantes y hermanas, se trata de una relación única. Muchas veces las vemos hablando la una al lado de la otra, pero cada una del tema que le preocupa, sin responderse, pero aún así y de manera inexplicable, consiguen ayudarse como ningún otro personaje las puede ayudar, porque no hace falta que hablen, pueden comunicarse con una cara, con una mirada, con una sonrisa y decirse mucho más de lo que las palabras pueden llegar a decir. Su lema "You are my person", se ha convertido en una de las grandes señas de identidad de la serie. Yo creo que esta relación es uno de los ingredientes que hacen actualmente de "Grey's Anatomy" una de las series de mayor éxito, por ese motivo tengo miedo por lo que ocurrirá en la siguiente temporada (que aún no está confirmada) cuando desaparezca el personaje de Cristina Yang... Aquí dejo un vídeo que recoge algunos de esos momentos:


Los cliffhangers: (¡Atención SPOILERS para aquellos que no la llevan al día!)

Otro punto fuerte de la serie han sido sus cliffhangers. Los guionistas, muy conscientes de lo difícil que resulta hoy en día mantener el interés de los espectadores hacia una serie, sobretodo a causa del amplio abanico de ofertas, han realizado un especial esfuerzo en dejarnos realmente con la boca abierta al final de cada temporada y con ganas de que pase el verano y podamos ver cómo sigue la cosa. Obviamente esto ha hecho que la suspensión de credibilidad de la serie a veces se aguantara un poco con pinzas: terremotos, choques de trenes, tiroteos, un barco medio hundido a lo Titanic, ciclogénesis explosivas, ambulancias que se estrellan contra la puerta del Seattle Grace, autobuses atropellando residentes del hospital, bombas, accidentes de avión, etc. Concretamente, los season finale de las temporadas 2, 3, 5 y 6 son verdaderas joyas, algunos son desgarradores, impresionantes, de cortarte la respiración por unos segundos. Aquí os dejo un vídeo con algunos de ellos (Advertencia: preparad paquete de Kleenex...)


Porque no sólo los cliffhangers han sido arrebatadores, ha habido muchos otros momentos que nos han hecho emocionarnos y sentir como pocas otras series lo han conseguido y eso es totalmente mérito de los guionistas. El momento en que Teddy, que culpa a Cristina de la muerte de su marido, le hace repetirle una y otra vez los pasos que siguió cuando le operó y éste murió sobre la mesa de operaciones, resulta enfermizo pero a la vez te rompe el corazón. O el desgarrador monólogo de Cristina Yang en la bañera junto a Owen, poco tiempo después de haber sido rescatada de su accidente de avión, narrando todo lo que sintió aquellos cuatro días viendo como sus compañeros iban muriendo junto con sus esperanzas de ser rescatada.


El sentido del humor:

Otra de las señas de identidad de esta serie y una de sus grandes constantes ha sido su sentido del humor. No es que sea un "Scrubs", pero sus creadores han sabido inyectarle la medida justa de humor en determinados momentos para que podamos relajarnos y dejar de sufrir con sus protagonistas, lo cual siempre es un golpe de aire fresco, totalmente necesario para paliar la gran intensidad dramática de algunas de sus historias.

Aquí quiero destacar a algunos personajes y a sus actores que gracias a su enorme talento cómico han sabido infundir a la serie este característico toque sin que resulte forzado o fuera de lugar. En primer lugar, teníamos a Katherine Heigl (interpretando a Izzie Stevens), por eso no es de extrañar que tras abandonar la serie la actriz se haya dedicado a hacer comedias (tontas) para el cine. También tenemos a la Dra. Miranda Bailey (alias "la Nazi"), resulta increíble que Chandra Wilson no haya ganado aún un Emmy o un Golden Globe por este papel. El personaje de la Dra. Addison Montgomery Shepherd (interpretada por Kate Walsh) entró con mal pie, presentándose como la ex-mujer de Derek que rompería la historia de amor entre Derek y Meredith, pero poco a poco su encanto y también su sentido del humor fueron ganándose nuestros corazoncitos (concretamente recuerdo un momento en qué Addison está viviendo en la caravana con Derek y se va al bosque a hacer pipí, con la mala suerte que su cosita toca unas ortigas, lo que le ocasiona una erupción en aquella parte donde nadie desearía tener una erupción y ella cree que ha sido un castigo divino por haberle sido infiel a su marido con su mejor amigo, Mark Sloan). Por supuesto, Cristina Yang, todo un personaje que ha dado algunos de los momentos más divertidos de la serie (personalmente, encuentro genial que llame a los interinos que están bajo su responsabilidad por los nombres de los enanitos: Grunón, Perezoso, etc, porque no quiere aprenderse sus verdaderos nombres...). Luego tenemos el personaje de Callie Torres (interpretado por Sara Ramirez), otro personaje que entró cayéndonos algo antipático, pero poco a poco el atractivo de la actriz superó esa primera impresión totalmente errónea, dejándonos ver una talentosa vis cómica (la actriz venía de interpretar el musical cómico "Spamalot"), Y como última incorporación al club de las cómicas, tenemos a April Kepner, que comenzó siendo un personaje algo irritante, pero que poco a poco también se está ganado un puesto en el pódium de los mejores personajes cómicos.

La música:

Si hablábamos del sentido del humor como una seña de identidad de la serie, no podemos dejar escapar la ocasión de mencionar su música como otro gran elemento distintivo (a veces escuchas una canción en la radio y piensas: mira esta canción es del estilillo de "Grey's Anatomy"). Algunas de estas canciones se han convertido en verdaderos hits: How To Save a Live, Chasing Cars, 9 Crimes, Breathe (2AM), Nowhere Warm, entre muchas otras. Curiosamente, cada episodio tiene por nombre el título de una canción. Y tampoco es de extrañar que los creadores de la serie no dejaran escapar la ocasión de hacer un episodio musical, donde destaco especialmente el papel de Sara Ramírez, que como he dicho antes, jugaba con ventaja, puesto que venía del mundo de los musicales. Aquí os dejo su interpretación de la canción The Story:



Como ya informé en el pasado post, Ellen Pompeo (Meredith) y Patrick Dempsey (Derek) ya han renovado contrato para una 11ª y 12ª temporada, aún falta la confirmación del resto de miembros del reparto, pero las audiencias parecen indicar que tenemos "Grey's Anatomy" para rato.


David